Mi experiencia con el retorno presencial a clases

Mi nombre es Fabián Francisco Martínez Pérez, vivo en la ciudad de Hualqui junto a mi mamá, mi papá y mis dos hermanos y soy estudiante del Colegio Alonso de Ercilla desde Pre Kinder.

Actualmente, soy alumno de primero medio y mi profesora jefe es a Srta. Margarita Silva. Me encanta mi colegio y me siento muy cómodo en mi curso ya que nos conocemos desde hace 11 años, me llevo bien con mis compañeros y pienso que somos un muy buen grupo.

El año 2020 y 2021 han sido difíciles para mí como estudiante ya que he perdido el contacto con mis compañeros, el vernos todos los días, la comunicación permanente, jugar, reírnos, conversar. Sin duda, ha sido todo un desafío.

Por otro lado, también hemos perdido el contacto directo con nuestros profesores. Si bien las clases online han permitido seguir aprendiendo y he logrado adaptarme a ellas, aún se extraña la sala de clases y las actividades que hacíamos con el profesor a nuestro lado. Siento que eso ha sido una prueba para mi aprendizaje ya que, debo confesar, en mi casa me distraigo con mayor facilidad.

Es por lo anterior que, junto con mi hermano, optamos por retornar de manera presencial a clases. Este regreso ha significado acostumbrarnos a una nueva modalidad híbrida, en la que dos grupos participamos de la clase del profesor: aquellos estudiantes que están en sus casas y quienes estamos en la sala. Esta modalidad ha traído nuevos desafíos y, si bien aún estamos en un periodo de ajuste, ya ha sido muy beneficioso el volver a la sala, contar con el apoyo de nuestros profesores y compartir con nuestros compañeros.
En cuanto a las medidas de higiene de establecimiento, son excelentes y nos hacen sentir muy seguros. Nos controlan temperatura, hay alcohol gel en todas las dependencias, las áreas de tránsito están demarcadas y existe gran espacio para circular.

Por último, me gustaría invitar a mis compañeros, a pesar de que estos años han sido complejos, a tener paciencia y a esforzarse, este es un proceso difícil, pero sabremos cómo superarlo.

Saludos fraternos

Fabián Martínez Pérez, primero medio